El Rambo de Requena recurre la condena por intentar matar a dos guardiaciviles
El representante legal de Pedro Lozano Giménez, el
conocido como el Rambo de Requena, ha recurrido la sentencia de la Audiencia de
Teruel que le condena a 27 años de prisión por la tentativa de homicidio de dos
guardias civiles a los que disparó mientras le perseguían, en los estertores de
su fuga por las sierras turolenses.
En su recurso ante el Tribunal Superior de Justicia
de Aragón (TSJA), al que ha tenido acceso Efe, el letrado de la defensa alega
“errores” en la valoración de la prueba por parte del tribunal al entender que
ni de las declaraciones de los propios agentes ni de las pruebas periciales se
desprende una voluntad homicida por parte del procesado.
Errores referidos tanto al disparo que efectuó con
una escopeta de postas sobre uno de los agentes, que pudo esconderse en busca
de protección, como el que realizó sobre el segundo, que resultó herido de
gravedad en el antebrazo.
En relación al primero de los agentes, el abogado
advierte de que si su cliente hubiese tenido intención de matar, el resultado
letal se habría producido finalmente con más disparos.
Respecto al agente que resultó herido, el letrado
argumenta que a pesar de la corta distancia a la que se encontraban en el
momento de sorprendido, de frente y a poco más de un metro, el acusado en
ningún momento disparó a su cabeza ni a partes vitales.
Por su parte, el representante legal de la acusación
particular en nombre de los dos agentes, el abogado oscense Jorge Piedrafita,
ha recurrido a su vez la sentencia para instar que los hechos sean considerados
como tentativa de asesinato en lugar de homicidio.
En su escrito, Piedrafita se refiere de forma
sistematizada y detallada a los elementos probados en la sentencia que, a su
juicio determinarían la existencia de alevosía y ensañamiento en la conducta
del procesado, elementos “típicos”, añade, que conforman el delito de
asesinato.
Una vez formulados estos recursos, las distintas
partes personadas en la causa formularán las alegaciones oportunas a ambos
escritos, antes de ser remitidos al TSJA para su enjuiciamiento en sala.
La Audiencia de Teruel imputó al procesado dos
delitos de homicidio en grado de tentativa, uno con el resultado de lesiones
graves, que castigó con penas de 11 y 9 años de prisión, respectivamente.
Además, le responsabilizó de otros delitos por
tenencia ilícita de armas (9 meses), robo continuado en casas habitadas (4 años
y 6 meses), hurto de vehículos (multa 2.160 euros), conducción temeraria (1
años) y coacciones (9 meses).
La presencia en la provincia de Teruel del Rambo de
Requena fue detectada en junio de 2020, después de protagonizar diversos
delitos violentos en la Comunidad de Valencia, pendientes aún de su
enjuiciamiento, y protagonizar una larga fuga por zonas boscosas y de campo.
.-
Comentarios
Publicar un comentario