La SAREB paraliza el desahucio de las 40 familias de Riba-roja hasta consensuar una solución favorable
El Ayuntamiento trabajará conjuntamente con la Generalitat en la negociación con la sociedad de gestión de activos
Así lo comunicó ayer el secretario autonómico de Vivienda, Alejandro Aguilar, y la directora general de Emergencia Habitacional, Pura Peris en la reunión mantenida con representantes de los municipios de Paterna, Alfafar, Torrente, Almassora, Monóvar y Riba-roja de Túria, entre otros.
Tras la reunión mantenida el pasado 26 de julio con
la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria
(Sareb), se gestó el compromiso de paralizar la orden de desahucio y estudiar
soluciones a las situaciones presentes y futuras de las emergencias
habitacionales colectivas que se están dando en varios municipios de la
Comunidad Valenciana.
En este sentido, se vislumbran diversas vías; la
compra de la vivienda por parte del propietario o la administración local, -
para lo que la GVA ha establecido una línea de 10 millones de euros destinados
a la adquisición de viviendas por parte de los ayuntamientos para uso social
(PLAN ADHA)- o la cesión del usufructo de la vivienda en el marco del Plan
Estatal de Vivienda 2022-2025, que tiene
como objetivo facilitar el acceso a ésta en régimen de alquiler a aquellos
sectores de la población con dificultades económicas y como segundo gran
objetivo, incrementar el parque público de vivienda.
En este sentido, el Ayuntamiento de Riba-roja ya ha
aportado a la GVA los informes de vulnerabilidad de las familias afectadas, así
como una valoración de las viviendas, con objeto de facilitar los trámites para
la negociación.
La emergencia habitacional y la falta de vivienda
pública es un tema que preocupa en gran medida al gobierno local y se está
trabajando incesantemente en ello desde la Oficina Municipal de la Vivienda.
El consistorio ya intermedió recientemente con la
SAREB y la GVA en la paralización del desahucio de los vecinos la calle
Pizarro, que el pasado 16 de noviembre fueron avisados de su expulsión. Desde
ese momento, el Ayuntamiento de Riba-roja de Túria, junto a la Conselleria de
Vivienda, ofrecieron todo su apoyo y realizaron gestiones de negociación.
Finalmente el juzgado de Primera Instancia número 3 de Llíria dio la razón a
las 20 familias de Riba-roja que residen en régimen de alquiler. La situación
se repite ahora con los vecinos de una vivienda residencial de la calle
Federico García Lorca, a los que el Ayuntamiento les trasladó ayer tarde un
mensaje de tranquilidad tras conocer el anuncio de la Sareb de paralizar el
desahucio.
La Generalitat avanzó que la Sareb se ha
comprometido a mantener reuniones bilaterales a partir de octubre con cada
municipio, con objeto de poder alcanzar acuerdos favorables para las partes. El
alcalde de Riba-roja, Robert Raga ha manifestado, “estamos al lado de las
familias y trabajaremos conjuntamente con la Generalitat Valenciana para lograr
una solución favorable”. Raga ha matizado, “la negociación debe realizarla la
administración autonómica, el Ayuntamiento no es un gestor inmobiliario y no
podemos ser punto de negociación entre las partes, no obstante no permitiremos
que ninguna familia pueda verse en la calle y lucharemos hasta el final”
.-
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