Llíria acoge la primera planta piloto de agrivoltaica en cítricos de la Comunitat Valenciana

Llíria se sitúa a la vanguardia de la innovación agrícola y energética con la puesta en marcha de la primera planta piloto de agrivoltaica aplicada al cultivo de cítricos en la Comunitat Valenciana. El proyecto, impulsado por la Cátedra Agrivoltaica de la Universitat Politècnica de València (UPV), busca analizar por primera vez cómo conviven la producción agrícola y la generación de energía solar fotovoltaica en un cultivo leñoso tan representativo del territorio valenciano como son los cítricos.

La agrivoltaica permite compatibilizar el uso agrícola del suelo con la instalación de paneles solares, aprovechando una misma superficie para ambos fines sin reducir la productividad de la tierra. Aunque esta técnica se ha aplicado con éxito desde hace décadas en cultivos hortícolas o de pequeño porte, hasta ahora no existían experiencias contrastadas en cítricos, principalmente por la complejidad técnica y el coste de las estructuras necesarias. La iniciativa desarrollada en Llíria pretende cubrir ese vacío de conocimiento con datos reales obtenidos a lo largo de varias campañas.

La planta piloto se ubica en una finca de mandarinos de la variedad Tango Gold, con árboles de cuatro años de edad, y cuenta con una potencia instalada de 30 kilovatios pico. La estructura, diseñada específicamente para no interferir en el desarrollo del cultivo, alcanza una altura de 5,5 metros y se divide en dos áreas diferenciadas: una con estructura fija y otra con sistema de seguimiento solar, lo que permitirá comparar resultados entre ambos modelos. Junto a ellas se mantiene una zona de control sin paneles, que servirá de referencia agronómica.

El proyecto comenzó el año pasado con el objetivo de medir de forma precisa las interacciones entre la instalación fotovoltaica y el cultivo en producción. Durante los próximos meses se desplegará un avanzado sistema de sensorización que registrará variables microclimáticas, energéticas y agronómicas, como la irradiancia real, la calidad de la cosecha, la productividad agrícola y energética o las posibles dificultades en las tareas de campo. Estos datos permitirán evaluar la viabilidad real del modelo y su posible implantación a mayor escala.

La iniciativa cuenta con la participación de empresas y entidades vinculadas al sector energético y agrario, como EMIN Energy, Fundación Elecnor, VAO Sistemas, GSFI Energía y Gestión y Administración Técnica Agraria, además de la Comunidad de Regantes de Llíria, en el marco de un convenio de colaboración orientado a la investigación aplicada.

El rector de la UPV, José E. Capilla, ha destacado que este proyecto generará información “sólida, propia y útil” para la toma de decisiones del sector citrícola valenciano, al tiempo que ha subrayado el valor de la colaboración entre universidad y territorio. Según Capilla, analizar de forma conjunta la productividad agronómica y el autoconsumo energético permitirá aportar competitividad y resiliencia a las explotaciones agrícolas, en un contexto marcado por el aumento de los costes energéticos y la necesidad de avanzar hacia modelos más sostenibles.

Además de su vertiente científica, la instalación funciona como planta de autoconsumo, lo que permitirá evaluar si la generación fotovoltaica contribuye a reducir los costes asociados al riego y a la gestión energética de la finca. Con este proyecto, Llíria se convierte en un banco de pruebas clave para el futuro del sector citrícola valenciano y para la integración efectiva de energías renovables en la agricultura.