El Gobierno asume el mando de la crisis del apagón tras la activación de la UME y la declaración de emergencia nacional

La Generalitat Valenciana solicitó la intervención del Ejército y elevó la emergencia al nivel 3 tras un día marcado por la suspensión de clases y el colapso de infraestructuras esenciales

El gran apagón que afectó a toda España el pasado lunes 28 de abril obligó a la Generalitat Valenciana a actuar con rapidez, convocando de urgencia el Centro de Coordinación Operativa Integrado (CECOPI). A primeras horas de la tarde, el Consell solicitó la intervención de la Unidad Militar de Emergencias (UME) para garantizar el suministro de combustible a los hospitales, pero no fue hasta pasadas las 22 horas cuando se decidió elevar la emergencia al nivel 3, cediendo el mando de la crisis al Ministerio del Interior.

La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana confirmó la activación de la UME para asistir en las zonas sanitarias con hospitales de referencia, que durante todo el lunes funcionaron a través de grupos electrógenos. Se registraron incidencias en servicios de radiología, lo que llevó a la suspensión de la actividad quirúrgica y al traslado de pacientes con oxigenoterapia domiciliaria a centros de salud.

Suspensión de las clases y cancelación de eventos

Ante la gravedad de la situación, el CECOPI acordó suspender la actividad lectiva en toda la Comunitat Valenciana, aunque manteniendo abiertos los centros escolares para atender a las familias que no pudieran hacerse cargo de sus hijos. También se recomendó a la ciudadanía evitar desplazamientos innecesarios y llenar los depósitos de gasolina para no agravar la escasez de combustible.

La manifestación prevista en Valencia para pedir la dimisión del presidente Carlos Mazón fue cancelada por decisión de la Delegación del Gobierno, atendiendo a la situación de emergencia y a las recomendaciones sanitarias. No obstante, la falta de consenso entre las más de 200 asociaciones convocantes complicó inicialmente su desconvocatoria.

Impacto en la movilidad y las infraestructuras

El apagón paralizó completamente la actividad de Metrovalencia y la red de tranvías de la capital, que no pudieron retomar su funcionamiento hasta la mañana del martes, aunque con retrasos e incidencias. Asimismo, se suspendieron las actividades festivas del San Vicente en Valencia y el Oceanogràfic se vio obligado a evacuar a los turistas que se encontraban en sus instalaciones.

Desde el Ayuntamiento de Valencia se pidió a la población retrasar su regreso a la ciudad tras las vacaciones de Semana Santa para evitar colapsos en las carreteras.

Una crisis en vísperas del Congreso del PPE

El apagón sorprendió a la Comunitat Valenciana en pleno festivo y a pocas horas del inicio del Congreso del Partido Popular Europeo en Valencia. Aunque el presidente Carlos Mazón no tenía actos públicos previstos el lunes, regresó de Alicante a Valencia para coordinar la respuesta desde el Palau de la Generalitat, donde convocó su propio gabinete de crisis. Está previsto que Mazón, junto a la alcaldesa de Valencia María José Catalá, den la bienvenida oficial a los asistentes del Congreso en las próximas horas.

La solicitud de la declaración de emergencia nacional, que el Consell evitó plantear durante la DANA de octubre, ha sido considerada esta vez necesaria para garantizar la mejor coordinación entre administraciones autonómicas y estatales.