Un hombre desaparecido en 1994 es identificado como uno de los fallecidos en la DANA

Las huellas dactilares revelaron su identidad tras la DANA, que dejó su cuerpo en un campo de naranjos

Las hijas de Miguel, un hombre desaparecido en 1994 y oficialmente declarado muerto, han descubierto que su padre en realidad llevaba años con vida y falleció recientemente durante la DANA que golpeó Valencia. Su cuerpo, tal como detalla el diario El Mundo, fue hallado en un campo de naranjos en Quart de Poblet tras la catástrofe, y solo pudo ser identificado por sus huellas dactilares.

Miguel desapareció sin dejar rastro, sin llevarse documentos ni pertenencias. Durante diez años no hubo señales de vida en registros sanitarios ni administrativos, por lo que un juez terminó por declararlo fallecido.

El inesperado desenlace

La sorpresa de la familia fue total al ser informada por la Policía del hallazgo. Una de sus hijas relató en televisión que pensaban que se trataba de un error. “Ahora resulta que estaba a cuatro horas y media de camino y nunca volvió a saber de nosotras”, explicó con incredulidad.

Miguel no dejó rastro de actividad durante décadas: ni movimientos bancarios, ni historia clínica, ni solicitud de pensión. “Si no fuera por las huellas, ni nos habríamos enterado”, lamentaron sus hijas, que aún intentan asimilar la extraña historia de su padre y su trágico destino.