Más de 20.000 visitantes acuden a la llamada de los dulces de Casinos

Oficialmente, ya podemos anunciar que la Navidad está aquí. Y es que no hay mejor faro para anunciar la llegada de estos días tan especiales que la luz que irradia desde Casinos y su Feria del Dulce Artesano, Peladillas y Turrones que cada año pone los mejores sabores y saberes de la tradición centenaria en el paladar de los valencianos y, además, enmarcado en una feria que cada año se supera a sí misma.

Casinos es dulce, efectivamente, por su historia y su tradición, pero también por sus gentes, amables y acogedoras, que convierten a este pequeño municipio del Camp de Túria en un gran regalo para todos los sentidos.

Más de 20.000 personas (sí, han leído bien) han rubricado con su visita a Casinos durante estos tres días el buen trabajo de la comisión organizadora, de los turroneros (alma de la feria) y de los propios vecinos que se han volcado, como siempre, con un evento que se ilumina a sí mismo y que prueba, sin duda, que el éxito de una iniciativa radica en el trabajo hecho con ilusión y al cuidado de cada detalle.

Talleres, conciertos, concursos, exhibiciones… un amplio abanico de actividades ha ofrecido a estos miles de visitantes, sea cual fuese su edad, la oportunidad de disfrutar a lo grande de una feria que, por supuesto, tiene su eje, en los dulces navideños que los artesanos casinenses han puesto a la vista, olfato y paladar de vecinos y amigos.

“Para mí ha sido un placer poder formar parte de la organización de la feria”, expresó Mari Carmen Chiva, concejala de la Feria durante el acto de clausura. “Ha sido un gran esfuerzo que sin duda ha merecido la pena, los vecinos bailando, los más pequeños divirtiéndose, los comercios llenos de gente… y por supuesto los maestros artesanos que son un orgullo para el pueblo”

La concejala quiso además “agradecer a los compañeros del ayuntamiento por ayudar a la preparación de este gran evento” deseando poder “seguir disfrutando de nuestra feria y de nuestra gente por muchos años”

..