La CHJ restaurará el bosque de ribera autóctono en el río Turia en Riba-roja

La actuación de eliminación de caña invasora comprende un tramo del río Turia en el término municipal de Riba-roja de Túria con una longitud de unos 800 m y 5 ha de superficie

La Confederación Hidrográfica del Júcar O. A. destina más de medio millón de euros a actuaciones de restauración del bosque de ribera autóctono, en el río Turia, en el término municipal de Riba-roja de Túria.

La actuación de restauración comprende la erradicación de la caña exótica invasora (Arundo donax), en un tramo de la ribera, que suma una longitud de 800 m y 5 ha de superficie.

Los trabajos se realizan con dos métodos diferentes. El primer método consiste en el desbroce de parte aérea y extracción directa del rizoma.

En el segundo método también se realiza el desbroce triturado mecánico de la parte aérea, pero en este caso, se procede a realizar un cubrimiento de la ribera con coberturas opacas, para evitar la exposición al sol y de esta forma agotar y matar el rizoma.

Ambas metodologías se han demostrado muy efectivas, con un porcentaje de prácticamente el 100% de erradicación de la caña invasora.

En el caso del método de las lonas opacas, éstas deberán permanecer en la ribera durante al menos 18 meses, lo que, al privar de luz a las cañas que rebrotan, consigue agotar las reservas de su tallo subterráneo.

Algunas de las zonas afectadas por el Arundo donax

Este proyecto se enmarca en un proyecto de colaboración con la Consellería de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, para alcanzar los objetivos ambientales recogidos en el Plan Hidrológico del Júcar, dentro del Parque Fluvial del Turia.

Los trabajos del proyecto se iniciaron el pasado 21 de julio, con los primeros desbroces y extracciones del rizoma de la caña, así como la colocación de los primeros geotextiles, por parte de la Confederación Hidrográfica del Júcar.

La Consellería de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, a través del Parque Fluvial del Turia, se encargará tanto del mantenimiento de las coberturas durante su permanencia en las riberas, así como de las plantaciones con especies de ribera autóctonas.

Problemática de la caña invasora

Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), la caña invasora o Arundo donax, es una de las más peligrosas y nocivas plantas alóctonas invasoras a escala mundial, por lo que forma parte de la lista de las 100 peores especies biológicas invasoras del Grupo de Especialistas sobre Especies Invasoras (ISSG).

Entre sus impactos negativos sobre el medio natural, podemos destacar:

Desplazamiento de la vegetación riparia nativa, que provoca un empobrecimiento del hábitat para la fauna terrestre asociada.

Disminución de la capacidad de desagüe de ríos y canales al taponar y reducir los cauces con sus sedimentos.

Por la gran biomasa que produce, es un factor de riesgo de cara a los incendios.

Debido a su intensa transpiración, reduce los recursos hídricos en zonas áridas donde los humedales escasean.

Las ventajas de la eliminación de la caña y su sustitución por los bosques de ribera, son múltiples. Por un lado, se tiene una menor exposición a los incendios forestales. También se mejora tanto la calidad del agua como el comportamiento hidrológico de los ríos. Y, por último, se consiguen mejoras en la biodiversidad del río, de tal forma que se convierten en corredores ecológicos de fauna y flora.

Competencias en relación con la caña invasora

En la demarcación del Júcar, la caña invasora está presente en muchas zonas, principalmente en los cauces de los ríos, afectando gravemente a la calidad de sus aguas. La eliminación de ésta es una tarea prioritaria en la Confederación Hidrográfica del Júcar, la cual destina una gran cantidad de recursos económicos para su eliminación.

No obstante, la erradicación de esta planta es una competencia compartida entre todas de administraciones.

Así, cuando la caña está presente en tramos urbanos de cauces, la competencia es de los ayuntamientos, a los cuales la Confederación Hidrográfica del Júcar les autoriza para que procedan a los desbroces selectivos y eliminación de rizoma.


Por otra parte, cuando suponen un riesgo de incendios, la competencia para su eliminación recae sobre la comunidad autónoma. Además, se debe señalar que la competencia sobre el control y eliminación de las plantas invasoras también competen a las comunidades autónomas.

Por último, si la caña exótica invasora esté suponiendo un empeoramiento del estado del río, siguiendo los criterios de calidad marcados por la Directiva Marco del Agua, la Confederación Hidrográfica del Júcar procede a su eliminación.

.-

Comentarios


EN TITULARES