Pedralba controlará la contaminación del tráfico en el municipio
Se han instalado 2 radares de conteo de vehículos en ambas entradas de la CV-377, un sensor de contaminación para detectar el nivel de partículas PM2.5 y un sonómetro
El Ayuntamiento de Pedralba ha llevado a cabo un importante proyecto medioambiental que permitirá mejorar la obtención de registros de contaminantes atmosféricos asociados al tráfico rodado en el municipio, de manera que estos datos posibiliten conocer no solamente la situación actual sino también mejorar la toma de decisiones y definir políticas contundentes respecto al problema que generan los vehículos de combustión a su paso por la localidad, tanto de salud pública como de emisión de gases de efecto invernadero.
INFORATGE SL (empresa que gestiona la red de
estaciones meteorológicas municipal y ofrece servicios personalizados de
meteorología a los responsables municipales) ha sido la empresa encargada del
desarrollo y ejecución del proyecto.
En concreto, gracias a esta iniciativa, se medirá el
impacto sobre los ciudadanos que genera el elevado paso de vehículos de la
CV-377 a su paso por Pedralba (muchos de ellos de gran tonelaje). Para realizar
un estudio riguroso y eficaz de la situación, se han instalado 2 radares de
conteo de vehículos ubicados en ambas entradas de la CV-377, un sensor de
contaminación para detectar el nivel de partículas PM2.5 y un sonómetro para
medir también la contaminación acústica provocada por el tráfico.
Resaltar que las partículas PM2.5 (generadas en gran
parte por la combustión de vehículos) conllevan un elevado riesgo para la salud
de las personas, puesto que pueden acumularse en el sistema respiratorio y
están asociadas con numerosos efectos negativos, como el aumento de las
enfermedades respiratorias y la disminución del funcionamiento pulmonar. Los
grupos más sensibles -niños, ancianos y personas con padecimientos
respiratorios y cardiacos – corren más riesgo de padecer los efectos negativos
de este contaminante.
Este proyecto ha tenido un coste de 20.424,80€ y ha
contado con la ayuda de la Diputación de València que ha financiado el 80%, lo
que supone un total de 16.339,84€, de la adquisición de los sensores a través
del programa de subvenciones con destino a actuaciones de Smart Cities 2020.
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