El Castell de Riba-roja repasa "la partitura plástica" de Pepe Gimeno con una antológica de 15 años de creación

+ TURIA | La muestra podrá ser visitada hasta el próximo 1 de octubre en L'Espai d'Art Contemporani
L'Espai d'Art Contemporani El Castell de Riba-roja de Túria inauguró este miércoles una exposición antológica del artista y diseñador valenciano Pepe Gimeno que repasa 15 años de creación bajo el título 'No solo mires. Escucha. Proyectos 2002/2017', una muestra organizada a través de nueve secciones que corresponden a diversas facetas de la trayectoria artística del autor, desde dibujos, esculturas y pinturas hasta piezas realizadas con basura o elementos cotidianos.

De este modo, objetos recogidos en la playa, como alambres, trozos de madera o elementos cotidianos mutilados, se mezclan con pinturas acrílicas, piezas de metacrilato y cemento para mostrar a los visitantes la "partitura plástica" de Gimeno. La exhibición se podrá visitar hasta octubre en las salas del centro de la localidad del Camp de Túria, informan los responsables de la iniciativa a través de un comunicado.
En primer lugar, 'Grafía Callada' es uno de los proyectos artísticos experimentales del diseñador valenciano dividido en dos componentes. El primero es un libro de edición limitada de 100 ejemplares e impreso en papel de algodón con una particularidad especial: "Ninguno de sus caracteres se puede leer", han señalado.
Por otra parte, los 113 originales que forman parte del volumen han sido enmarcados de dos en dos de manera que sugieren las dobles páginas del libro. Las obras, o capítulos, fueron creadas entre 2002 y 2004 con los desperdicios que Gimeno encontraba cuando paseaba por la playa. "Debo de tener el síndrome de Diógenes", ha bromeado el autor.
En segundo lugar, en el volumen 'Grafía Cantada', una animación digital de poco más de nueve minutos plasma la vídeo-partitura compuesta por el autor. En este caso, los restos vegetales y plásticos, ordenados en el tiempo y el espacio, se convierten en un "objeto sonoro", han explicado.
Para su realización, Gimeno contó con la inspiración y dirección de Sonia Megías, la interpretación del Coro Delantal y la producción de vídeo de Marta J. Lamsfus. Por otro lado, la sección 'Diario de un Náufrago' transforma al diseñador en un "poeta de elementos encontrados". Las letras de sus versos están escritas con clavos oxidados, suelas de zapatos y partes de unas gafas de sol.
El autor del texto de presentación de la exposición, Salva Torres, ha explicado que construye "estructuras que, pese a carecer de un referente concreto, transmiten, mediante la sutil combinatoria de sus elementos, sensaciones asociadas con estados de ánimo para los cuales no tenemos palabras, pero sí un repertorio de indicios provocados por la contemplación de la propia obra de arte", ha ilustrado.
59 fragmentos
En 2009, Gimeno utilizó cartones y papeles de periódico como lienzos sobre los que hizo trazos con pintura acrílica, o pegaba pajitas de plástico, y convirtió tubos de acero en mástiles donde enganchaba restos vegetales, plásticos y gomas con el fin de construir un discurso para los sentidos, una narración gráfica poco convencional, con ausencia de cualquier signo reconocible".
Esas son las piezas que podemos contemplar en el 'Manifiesto Emocional' y cuyo significado solo se puede descifrar mediante "la evocación y la sugerencia". "Veo pequeñas verdades pero en ningún momento alcanzo a entender la totalidad del caos que me rodea", describe el artista sobre su percepción del mundo
Una mirada que trasladó con el pincel sobre varios soportes en unas composiciones cuyas piezas originales fueron cortadas, desordenadas y colocadas de nuevo para crear nuevas secuencias narrativas. Son las 'Fragmentaciones', "basadas en la partición discursiva que algunos escritores y cineastas utilizan en sus novelas y películas", han apuntado.
Asimismo, el volumen 'The Green Bag' está formada por 26 esculturas surgidas a partir de los alambres que contenía una bolsa verde que Gimeno encontró en una estantería. Tras esparcir aquellos objetos sobre la mesa y ver un conjunto de formas aleatorias, el artista asoció la imagen "con las páginas de un diccionario". Eran "formas sueltas que, como las palabras, parecían buscar una frase que las completara y les diera sentido".
 De esta manera, Gimeno empezó a disponer los filamentos en el espacio, añadiendo otros elementos cuando era necesario, hasta proporcionar a cada una de las piezas "de un contexto determinado que les dotara de significado", han explicado las mismas fuentes.
Dibujos, esculturas y pinturas
Por otro lado, en 2010, con pincel plasmó repetidamente sobre el papel todo aquello que "le dictaba el inconsciente". Cómo resultado sugirieron imágenes figurativas y composiciones abstratas que han dado origen a la sección 'Dibujos automáticos'.
"Mi inconsciente quedó reflejado minuciosamente en el proceso", ha subrayado el artista. Entre 2014 y 2016, el diseñador también creó nuevas piezas a partir de materiales de desecho. Ladrillos desmenuzados, tapones de botellas y trozos de rejas metálicas configuran la octava sección, 'Esculturas', donde el autor quiere armar "estructuras narrativas que cuenten historias, que planteen conflictos y describan situaciones y vivencias".
Finalmente, las 'Pinturas' (2017) surgió de la voluntad de trasladar al lienzo las estructuras escultóricas del autor. Se recrea así "el diálogo que plantean y la emoción que me producen" las figuras "desde un nuevo punto de vista, desde una nueva mirada", han concluido.

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