El mejillón cebra regresa al Turia

+ TURIA | El descenso del nivel de agua en los pantanos saca a relucir la magnitud de la plaga
"Su efecto como transformador de las condiciones ambientales de los hábitats donde se localiza, su fuerte impacto sobre otras especies autóctonas, algunas de ellas amenazadas, y las graves consecuencias que su proliferación tiene para las instalaciones de agua convierten al mejillón cebra en una de las especies invasoras más dañinas del mundo". Así resume el catálogo español de especies exóticas invasoras del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente los riesgos que acompañan a este bivalvo invasor que, en el caso de Valencia, ya se ha extendido por buena parte de la cuenca del Júcar.

Tal como informa el diario LAS PROVINCIAS, la proximidad de su época de desove, entre septiembre y octubre, supone una nueva amenaza para las alrededor de 45.000 hectáreas de cultivos que se riegan con recursos de la Acequia Real del Júcar y del canal Júcar-Turia. Cada hembra de mejillón puede liberar alrededor de un millón de óvulos al año, por lo que cada época de cría supone una gran explosión demográfica.
Además, el último mapa de masas de agua afectadas por esta especie invasora elaborado por la Confederación Hidrográfica del Júcar y la situación que se aprecia en los embalses, tras el descenso del nivel de los pantanos, no ofrecen una imagen demasiado esperanzadora. Por una parte, el mapa de la CHJ, de julio de este año, pone de manifiesto que las zonas más afectadas son el río Júcar, entre los embalses de la Muela y Cortes II y su desembocadura, el Magro, a partir del pantano de Forata, el canal Júcar-Turia, entre el embalse de Tous y el río Turia, y el río Mijares, desde el pantano de Sichar hasta su desembocadura. Por otra, las colonias de mejillón cebra aparecidas en los embalses de Tous y Forata, después de que hayan perdido buena parte de sus recursos, pone de manifiesto que la plaga va a más. LEER ARTÍCULO COMPLETO

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