Carlos Mazón vuelve a cuestionar la gestión de Aemet durante el último temporal
El president critica que el aviso por lluvias extremas en la Ribera y la Safor “no fue de anticipación, sino de observación”, y reclama una mejora en la coordinación meteorológica y de emergencias
El president de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón,
ha vuelto a poner en duda el modelo de previsión de la Agencia
Estatal de Meteorología (Aemet) tras los recientes episodios de
lluvias torrenciales que afectaron a diversas comarcas de la Comunitat. Durante
su intervención en Alicante, en el marco del encuentro
sobre el trasvase Tajo-Segura junto a representantes de Andalucía, Murcia y el Sindicato Central de Regantes (SCRATS),
Mazón lamentó la falta de antelación en el aviso rojo decretado el lunes para
el sur de la provincia de Valencia.
Según
explicó, “el aviso rojo no fue de anticipación, sino de observación,
no es de ahora avisando de un nivel rojo dentro de unas horas, sino de ahora
para ahora”. El líder valenciano criticó que esta situación se produzca “el mismo día en que nos reunimos para afianzar un frente común por
el riesgo cierto de sequía que sufre nuestra tierra, y pocas horas después se
nos comunica el nivel rojo por lluvias torrenciales en la Ribera y la Safor”.
Contradicciones entre sequía y temporal
Mazón subrayó lo que considera una paradoja en la gestión meteorológica: “Las contradicciones que vive nuestra tierra hacen
que en un mismo día hablemos de sequía y de inundaciones”, apuntó.
El president
ha reiterado su voluntad de revisar los
protocolos de coordinación y comunicación entre la Generalitat y Aemet,
con el objetivo de evitar situaciones en las que los avisos de emergencia “lleguen tarde o no reflejen la gravedad real del fenómeno”.
El precedente del episodio en Pilar de la Horadada
El debate sobre la eficacia de las alertas meteorológicas no es nuevo. El
pasado sábado, cuando el temporal afectó con especial intensidad a la comarca
de la Vega Baja, Mazón visitó Pilar
de la Horadada, donde se registraron 153
litros por metro cuadrado. Allí reprochó a Aemet que el momento más duro de la lluvia coincidiera con la desactivación
de la alerta roja, que fue rebajada a naranja a las 18:00 horas
del viernes.
Pocas horas
después, a las 2:45 de la madrugada,
la Generalitat activó el nivel 1 de emergencia por inundaciones,
tras la tromba de agua que anegó calles y viviendas en el municipio. Mazón
calificó aquel episodio de “sorprendente
y preocupante”, insistiendo en la necesidad de mejorar la anticipación y la coordinación institucional
en materia de emergencias meteorológicas.
Un llamamiento a reforzar la previsión y la respuesta
El president valenciano ha defendido que la precisión
y anticipación en las alertas son claves para evitar riesgos y
daños mayores, especialmente en una comunidad con alta exposición a fenómenos
extremos. En este sentido, ha reiterado que su gobierno trabajará para que la Generalitat disponga de herramientas de observación y alerta
propias, complementarias a las de la Aemet.
“En esta ocasión no ha sido un aviso de previsión, sino por
observación, y eso nos obliga a reflexionar sobre cómo mejorar
la información y la reacción ante episodios de lluvias torrenciales”, concluyó
Mazón.






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